El Rabino Shemuel ben Moshé de
Medina (abreviado רשד”ם) nació
en Salónica, Grecia, en 1505. Fue el fundador y Rosh Yeshibá de la academia
talmúdica de esa ciudad. Sus maestros fueron el famoso rabino Yosef Taitatsaq,
que también fue uno de los maestros del rabino Yosef Caro, y el rabino Levi Ibn
Habib. Estos dos rabinos eran muy diferentes en su orientación y horizontes
intelectuales. Ambos eran grandes luminarias, pero mientras que el Rab Ibn
Habib se inclinaba por la filosofía y la lógica talmúdica, el rabino Taitatsaq
era más proclive al misticismo y la Qabbala. El Rab Medina absorbió de estos
dos modelos, pero irónicamente, él no se dedicó ni a la filosofía ni al
misticismo sino a la Halajá (ley judía).
Sufrió muchas desgracias
personales. Perdió a su padre a una edad muy temprana. Luego, cuando tenía unos
cincuenta años de edad, sus dos yernos, R. Yosef Tsarfati y R. Ytsjaq Hayoun,
fallecieron a una edad muy joven, y el Rab Medina quedó a cargo de las dos
viudas, sus dos únicas hijas, y de sus numerosos niños. Unos años más tarde, su
hermano, que fue quien lo educó y quien lo ayudaba financieramente, también
falleció. Y el Rab Medina también quedó a cargo de su cuñada y sus hijos. A
pesar de todas estas dificultades nunca abandonó el estudio de la Tora y
continuó escribiendo y enseñando. En todo este tiempo, no quiso beneficiarse de
los fondos comunitarios, a pesar de que estaba en una gran necesidad de dinero.
Por el contrario, como un testimonio de su gran humildad, pagaba sus impuestos
comunales, de los cuales estaba exento como rabino, para no presumir de su
estudio de Torá (כדי לא להחזיק
עצמו כתלמיד חכם).
El Rabino Medina fundó la Yeshiba
de Salónica en la que introdujo el sistema de enseñanza de los grandes eruditos
talmúdicos españoles de la época del Rab Isaac Campanton. Tuvo muchos
discípulos, entre ellos rabino Abraham di Boton, autor de Lejem Mishné. Esta
Yeshiba era apoyada por la famosa filántropa judía Doña Gracia Mendes Nasí.
El Rabino Medina era una
autoridad halájica aceptada en su comunidad, Salónica, y mucho más allá.
Numerosas preguntas halájicas le fueron dirigidas desde todas las ciudades del
Imperio Otomano e Italia. El Rab Jaim Shabbetai dijo de él: “Era un juez
experto en jurisprudencia Talmúdica y poseía conocimientos enciclopédicos. Uno
no debe desviarse un ápice de sus decisiones”. Sus decisiones Halájicas se
estudiaron no sólo entre los Jajamim Sefaradim sino también entre los Rabbanim
de Europa del Este, y sus decisiones Halajicas son a menudo citadas en los
tiempos modernos por los jueces en el Estado de Israel en apoyo de sus propias
decisiones.
El Rab Medina fue uno de los
principales líderes de las congregaciones procedentes del “Gerush” (la
expulsión de España, 1492, y Portugal,
1497). El propio rabino Medina era de origen portugués y ejerció como el rabino
de la sinagoga portuguesa en Salónica. Sin embargo, cuando hubo un debate en
torno a qué costumbre seguir en las Tefilot (oraciones), y cada congregación quería imprimir su propio
Siddur, el rab Medina decidió imprimir la versión de los judíos españoles
(Sefaradim), y no la de los portugueses, en base a los méritos de esa versión,
que era, en sus propias palabras, “impecable y accesible a todos”.
En una de las controversias que
tuvieron lugar en Salónica y en otras comunidades judías, el rabino Medina
mantuvo el derecho de los miembros mas pudientes de la comunidad a regular la
dirección de los asuntos comunales. Según él, como había sido la costumbre en
España, el liderazgo de la comunidad debía estar en las manos de aquellos que
asumen la responsabilidad económica de la misma, siempre y cuando no se
desviaran de los principios religiosos.
El Rab Medina murió en Salónica
en 1589. Su hijo fue el rabino Moshé De Medina, un rabino muy importante y un
exitoso comerciante y filántropo, ayudó a fundar una nueva imprenta hebrea
donde muchos libros importantes de Torá fueron publicados por primera vez,
gracias a sus generosos esfuerzos. Entre estos libros estaba, por supuesto, el
libro de su padre Pisqe Rabbí Shemuel De Medina (שו”ת מהרשד”ם). Este libro contiene un total
de 956 preguntas y respuestas sobre todas las áreas de la ley judía, con una
introducción de su propio hijo, Moshé.
Fuente: http://halaja.org